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Ismael Chirino, el delantero que transformó su pasión en resultados y se ganó un lugar entre los mejores del año
El fútbol tiene una magia especial: puede emocionar, unir y hacer vibrar a toda una ciudad. En ese universo apasionado, Ismael Chirino se convirtió en uno de los jugadores más destacados de Villa de Merlo durante el 2024, logrando un nivel tan alto que le valió el reconocimiento como ganador del PRODEPOR de Plata 2025.
24 de noviembre de 2025 - 10:55 hs.
Su premio no sorprende a nadie que lo haya visto jugar: Ismael es intensidad, compromiso, talento y una entrega total cada vez que pisa la cancha.
Un futbolista que juega con el corazón en la camiseta
Lo primero que salta a la vista cuando se lo ve jugar es su actitud.
Ismael no escatima esfuerzos: corre, presiona, acompaña, se ofrece como pase, busca espacios y disputa cada pelota como si fuera la última del partido.
Esa energía lo vuelve un delantero incómodo para cualquier defensa.
A su intensidad se suma una técnica precisa: buen dominio, lectura de juego, potencia física y una capacidad natural para encontrar el momento justo para definir.
Tiene intuición de área, ese instinto que no se entrena, que simplemente se trae.
Un 2024 donde su nivel explotó
Este año fue decisivo para Ismael.
Consolidadísimo dentro de su equipo, aportó goles importantes, asistencias y, sobre todo, una regularidad que lo hizo destacar en la liga.
Los partidos clave lo encontraron siempre protagonista, mostrando carácter en momentos donde se necesita más que técnica: se necesita personalidad.
Cada fecha lo vio crecer, asumir responsabilidades y convertirse en una pieza clave dentro del funcionamiento del equipo.
Un referente silencioso que inspira a los más jóvenes
Ismael no necesita levantar la voz para transmitir ejemplo.
Su forma de entrenar, su compromiso con el club y su manera de vivir el fútbol hablan por él.
Los más chicos lo miran con admiración porque ven en él la mezcla perfecta entre pasión, sacrificio y disfrute.
Ismael juega con el alma, pero también con inteligencia.
Y esa combinación es, quizás, su rasgo más distintivo.
Un reconocimiento que pone en valor su entrega
El PRODEPOR de Plata llega en el mejor momento de su carrera.
Es un premio que reconoce su desempeño deportivo, pero también su actitud: la de un jugador que no negocia la entrega, que respeta el deporte y que representa a Merlo con orgullo.
Para la ciudad, Ismael es presente.
Para su equipo, es una pieza indispensable.
Para su futuro, este premio es apenas un escalón más en un camino que sigue creciendo.
Y para él mismo, seguramente, es una confirmación:
todo lo que dio… valió la pena.
