Política
Ironía de alto nivel: Municipios en estado de emergencia hídrica mientras el Gobierno Provincial, junto a San Luis Agua, se \”divierten en el agua\” con juguetes caros.
Luego de décadas de una desastrosa administración por parte de la Cooperativa de provisión Agua de Merlo que culminara con uno de los peores escenarios jamás vividos con respecto a la escasez del recurso hídrico en nuestra Ciudad y que colmó definitivamente la paciencia de comerciantes y vecinos, la Provincia por fin apareció en escena, […]
7 de septiembre de 2022 - 23:54 hs.
Luego de décadas de una desastrosa administración por parte de la Cooperativa de provisión Agua de Merlo que culminara con uno de los peores escenarios jamás vividos con respecto a la escasez del recurso hídrico en nuestra Ciudad y que colmó definitivamente la paciencia de comerciantes y vecinos, la Provincia por fin apareció en escena, después de años de reclamos, anunciando con \”bombos y platillos\” que traería las ansiadas soluciones a un problema histórico de nuestra Comunidad.
El 1 de agosto pasado y, como primera medida, el Gobernador decidió rescindir el contrato con el Municipio de nuestra Villa, por el cual administraba cinco estaciones de bombeo y tomas de agua de los Arroyos, otorgando a San Luis Agua, la facultad de operar y mantener las mismas, cuando es bien sabido que el principal causante del déficit del recurso y las constantes roturas de los sistemas mencionados se deben, principalmente, a la infraestructura deficiente que opera bajo la responsabilidad de la Cooperativa local, siendo este, el primer y real obstáculo a sortear para lograr regularizar el servicio.
Esta acción fue una clara \”bomba de humo\”, una burda excusa mediante la que se intentó ocultar la escandalosa inoperancia de los directivos de la Cooperativa que representan, directamente, a los intereses del Gobierno provincial, con el fin de dejar como único responsable al Municipio de la Villa de todas las falencias estructurales y administrativas que impiden a la población acceder al preciado líquido vital.
Después de anunciar el comienzo de las obras necesarias que darian respuesta a las demandas sociales, el Gobernador, habiendo cumplido con su clásico carácter político demagógico, dejó en segundo plano la problemática merlina y materializó una idea \”mejor y más urgente\”: organizar junto a San Luis Agua una competencia motonáutica, \”la más grande de Sudamérica\” según reza la pauta publicitaria oficial, para la cual, se destinaron millones de pesos de los contribuyentes, violando además, las leyes de navegación de la provincia.
Aún cuando todo el pueblo, incluyendo al propio Intendente Municipal, tuvo que recurrir tiempo atrás a súplicas para ser oído, el Gobernador se dedicó a mantener una postura inerte frente a nuestras necesidades, actuando solo desde las palabras y no desde la ejecución de las acciones pertinentes, atinando proritariamente, a cumplir con gran desacierto una caprichosa, innecesaria y costosísima fantasía fuera de todo contexto y coherencia.
Mientras se destinan fondos provinciales para la concreción de proyectos por demás ridículos, hoy continuamos lamentando los constantes cortes en el suministro. Seguimos preguntándonos qué es lo que va a suceder cuando llegue la temporada turística y el temor se acrecienta y adueña de los pensamientos de comerciantes y particulares de nuestra Ciudad. Hoy nos invade la incertidumbre de no saber por qué a pesar de ser un derecho humano fundamental, para el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá no se enmarca como eje prioritario dentro de su Agenda, tal como lo fue organizar, con total celeridad, una banal competencia con vehículos coloridos y veloces de valores exorbitantes que se deslizan, como si se tratara del más desafiante sarcasmo, sobre el tan preciado y escaso elemento.
Es alarmante el desgano del oficialismo y de la mencionada Sociedad del Estado, cuando se trata de trabajar en pos del bienestar social. Es indignante que todas las promesas se utilicen con fines de campaña y no como un verdadero compromiso con la gente que hoy está padeciendo los perjuicios de su propia forma de hacer política.
Necesitamos, con suma urgencia, que se dejen de lado los prejuicios partidistas que tanto daño hacen al desarrollo de una democracia plena, con el único fin de que se nos permita vivir de manera digna, lo cual, es inalcanzable si nos vemos privados por inacción del Ejecutivo provincial, de un recurso tan elemental.