Policiales
Santa Rosa del Conlara: la historia detrás de la anciana que fue enterrada en un patio
La autopsia confirmó que Blanca Provenza, la mujer de 91 años que fue sepultada en el patio de una vivienda en Santa Rosa del Conlara, no tenía signos de una muerte violenta. Según los informes forenses, las causas de su fallecimiento fueron compatibles con un origen natural.
9 de abril de 2025 - 11:51 hs.

El caso, que generó un gran impacto en la comunidad, fue dado a conocer por el medio El Chorrillero, que entrevistó a Jorge Gaguini y Mónica Dauga, yerno e hija de la mujer fallecida. Ambos contaron cómo vivieron los últimos años junto a Blanca y por qué decidieron enterrarla en el terreno de su casa.
En 2015, Mónica se hizo cargo del cuidado de su madre, quien sufría demencia senil. Años antes, ella y su pareja habían dejado Buenos Aires tras una tragedia: el asesinato de un hijo en un intento de robo. Buscaron paz en San Luis, se instalaron en el barrio Estación Conlara, y comenzaron a construir su casa con mucho esfuerzo.
Cuando Blanca falleció, el 4 de abril de 2024, no contaban con los medios económicos para cumplir su voluntad de ser cremada. “No sabíamos qué hacer. Asumo la responsabilidad, pero fue un momento límite. El error fue no pedir ayuda”, expresó Jorge. Ambos admitieron que durante un año siguieron cobrando la jubilación de la mujer, conscientes de que eso podría traerles consecuencias judiciales.
Fue el propio Jorge quien, en busca de regularizar la situación, habló con la médica de cabecera de su suegra y pidió un certificado de defunción. A partir de ahí se inició una investigación judicial que culminó con un allanamiento el pasado 4 de marzo. Él mismo guió a los efectivos hasta el lugar donde había enterrado a Blanca, en un pozo originalmente destinado para un biodigestor.
Contó que preparó el cuerpo según una práctica funeraria inspirada en la doctrina musulmana: en una caja hecha de durloc, en posición fetal, envuelta en su manta preferida. “Estoy muy tranquilo. Hice más por mi suegra que por mi suegra”, sostuvo.
Ahora esperan la decisión de la Justicia. La causa está a cargo del fiscal César Hugo Salazar Molina, y podrían enfrentar cargos por defraudación contra el Estado. Mientras tanto, no han recibido el cuerpo para realizar el sepelio y piden ayuda económica para afrontar ese gasto. “Con lo justo levantamos esta casa, no tenemos más. Por eso la estamos vendiendo”, cerró Jorge.
Fuente: El Chorrillero