Chile enfrenta la “tragedia más grande” desde el tsunami por incendios forestales: al menos 112 muertos

Chile combate por tercer día los incendios forestales más mortíferos de su historia reciente, con varios puntos ardiendo en la región de Valparaíso y con 112 muertos. El dato surge del reporte del Servicio Médico Legal (SML), órgano estatal asignado para dar el balance de víctimas durante la crisis, definida por el presidente Gabriel Boric como “la tragedia más grande desde el terremoto de 2010″

Este domingo por la noche, el ministro del Interior, Manuel Monsalve, actualizó la cifra de fallecidos y resaltó que el SML identificó 32 cuerpos.

En tanto, el mandatario chileno dijo que sólo en la zona de Quilpué había más de 1300 casas destruidas, un número que podría ser en la comuna de Viña del Mar, una de las más grandes y pobladas golpeadas por el fuego.

En ese sentido, en horas de la tarde informó que el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres envió a la región “700 toneladas de víveres para los damnificados”. “Los daños son muy grandes y tenemos incendios activos en diferentes zonas del país. Todos los recursos y esfuerzos están siendo desplegados”, remarcó.

En esa comuna, sectores de casas y automóviles permanecen carbonizados, donde el viernes miles de vecinos quedaron atrapados durante horas en el tráfico, tratando de escapar bajo una lluvia de brasas forestales.

Las condiciones del clima de las últimas horas parecen dar una tregua “con una vaguada costera que permite enfriar el incendio”, dijo la ministra del Interior, Carolina Tohá, al referirse a un fenómeno típico en la costa del Pacífico, que produce mucha nubosidad, alta humedad y por ende disminución de la temperaturas.

En toda la región, conocida por sus playas turísticas y producción vitivinícola, se encuentran desplegadas 17 brigadas de bomberos, 1300 soldados y voluntarios civiles que ayudan a combatir las llamas, pero también a los damnificados que perdieron todo.

Los testimonios desgarradores de víctimas que perdieron casa y familia así como las imágenes de llamaradas cubriendo colinas pobladas en Viña del Mar, región de Valparaíso, llevaron al papa Francisco a referirse a esta catástrofe chilena.